lunes, 8 de septiembre de 2008

Hablar por hablar

¡Vaya polémica se ha suscitado en las últimas horas con el duelo de declaraciones entre Contador y Valverde! El primero se queja de que no tuvo apoyo a la hora de alejar en la general a Sastre en la etapa de Pla de Beret, mientras que el murciano se defiende diciendo que bastante tenía con aguantar la rueda del ganador del Giro 2008.

Valverde tenía, por supuesto, fuerzas para ayudar, pero también tiene un director al que le gusta que otros le hagan la carrera, y eso es el único motivo por el cual se acomodó a rueda del de Astana. Contador no debió desesperarse pidiendo apoyo, sino pensar en que esta Vuelta se va a decidir entre El Angliru y la cronoescalada a Navacerrada, y, sin duda, en esos dos envites tiene todas las de estar por delante de Valverde. Ayer pudo haber distanciado a Sastre y, sobre todo, a un Levi Leipheimer, que aunque ha demostrado ser su fiel gregario, si se ve con opciones pasada la montaña asturiana no las va a desaprovechar, y una crono es una crono y puede pasar de todo.

En la etapa de hoy, más o menos el guión previsto, fuga bidón, en la que iban nombres importantes como Rebellin, Cunego o el propio Moncoutie, que llega a meta. Victoria de etapa para el belga Greg van Avermaet del Silence Lotto, y liderato por 11 segundos para un tío que se lo merece, Egoi Martínez. El margen fue tan escaso, no porque Astana se resistiese, todo lo contrario, sino porque CSC Saxo Bank y Caisse d'Epargne curraron duro para que los de Johan Bruyneel siguiesen aguantando la responsabilidad de tener en sus filas al lider de la carrera. Afortunadamente para el navarro, llevaba un compañero en la fuga que se desfondó hasta que tuvo fuerzas, luego él mismo se dejó la piel y tuvo un bonito premio en forma de jersey oro.

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